IoSonoValeria

Mi diario de a bordo


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Y para el weekend …

tenemos … Primero que es viernes y ya es en sí misma una buenísima noticia ;-).

536971_526088994130927_319843304_n   Rescato esta imagen vista en Facebook para que os hagáis una idea de lo molón que es este día … y os informo de que hoy se inaugura un nuevo local dedicado a la música. Se trata de TheSoul y se encuentra en Santafé. Aquí el cartel del programa de este fin de semana, con concierto de Milestones incluido:

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Por otra parte, este fin de semana se celebra «Vive Loja«: dos días llenos de actividades alrededor de la música, jamonada gratis y desayuno musical con Antonio Arias. Toda la información aquí: http://milivingroom.com/viva-loja/

Y si estás en la playa y lo tuyo es el jazz … no te pierdas el sábado 24 el evento programado en el Pub Fusión de Salobreña:

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Y si lo que quieres es escaparte a la vecina provincia de Jaén y el folk te gusta  quiere conocerlo, cita en Jódar:

Cartel de la 41 Cita con la Música Folk de Jódar.

.-.-.-.-.-.

Vámonos a las letras …

Una entrevista que no os debéis perder: Ana María Matute.

644324_10201272550588830_1128983049_n  http://cultura.elpais.com/cultura/2013/08/21/actualidad/1377105265_402172.HTML

Dos poemas …

 

El inefable gozo (Gabriele D’Annunzio)

…Celebra el grande, el inefable goce

de vivir, de ser joven, de ser fuerte,

de hincar los dientes ávidos y blancos

en los más dulces frutos terrenales.

De posar las audaces, sabias manos

sobre todo lo más puro y secreto,

y de tender el arco contra todas

las presas que voraz deseo asecha.

De oír todas las músicas livianas,

y mirar, con pupilas fulgurantes,

la bella faz del mundo, como mira

un amante feliz a su adorada.

A ti el placer, ¡oh amiga!

¡A ti el ensueño! ¡

Yo quiero revestirte la más roja

de las púrpuras regias, siquier tiña

su seda con la sangre de mis venas.

Yo quiero coronarte de albas rosas

para que así, transfigurada, cantes

la divina Alegría, la Alegría,

la Alegría, magnífica, invencible!

 

PANTALLAS V (Silvia Gallego)

Teclea mi piel con asteriscos.

 

Que tu mensaje de texto

sea voz en mis poros.

 

Que tu número anuncie

besos de almohadilla.

 

Adivina mi textura

con tu escáner.

 

La web hoy se hace cómplice

en la línea que te busca.

.-.-.-.-.-.-.-.-

Termino con un artículo que me parece muy interesante. Los que intentamos crear contenido interesante para nuestros clientes también tenemos días de sequía, días de no inspiración, días de bajón en definitiva. Ahí va un empujón para que sepas que tú también puedes tener uno de esos días y qué hacer para salir del bache,. El post pertenece a Víctor Martín.

http://victormartinp.com/2013/08/hasta-richard-branson-puede-tener-un-dia-de-bajon/?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed%3A+victormartin+%28V%C3%ADctor+Mart%C3%ADn%29

.-.-.-.-.-.-.-.-

¿Más premisas para este fin de semana?

La de siempre … ¡sed felices!

Besos mil,

Valeria.

 


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Bonjour!

Muy buenos días, navegantes… ¿Cómo ha ido el fin de semana? Espero genial…

Hoy voy a dedicar el post a las buenas nuevas de nuestros amigos escritores, comenzando por:

a)  Un completísimo artículo de Puerto Gómez Corredero sobre la poesía de Emilia Oliva. Ha sido publicado en La Náusea e incluye una serie de poemas de Emilia que no os dejarán indiferentes: http://lanausea2000.blogspot.com/ .

…y:

b) Víctor Lorenzo Cinca ha visto como su «El Naúfrago» , un logradísimo microrrelato sobre la ironía de la integridad llevada a su extremo, ha sido elegido finalista en el VIII Certamen Internacional de Microcuento Fantástico MiNatura 2010.  En breve será publicado en el dossier especial que la revista MiNatura (http://www.servercronos.net/bloglgc/index.php/minatura/) está editando con la ganadora y los finalistas del concurso. Aquí está la obra:

     EL NÁUFRAGO (Víctor Lorenzo Cinca)

Como cada mañana, desde hace ya más de tres años, escribe un mensaje en una hoja de papel, lo enrolla con mucho cuidado y lo mete en una botella vacía. La sella con un tapón de corcho y se dirige a la playa para lanzar al mar su dosis diaria de esperanza. Ha pasado todo este tiempo solo, sin poder hablar con nadie, aislado del mundo, pero hace ya unos meses que le acompañan en la isla un par de amigos imaginarios, fruto del delirio de su soledad, con los que puede compartir sus preocupaciones. Al principio no se caían muy bien, pero poco a poco, prestándose ayuda mutua en los momentos difíciles, han ido fraguando una buena relación de amistad, se han ido haciendo inseparables.

Se acerca a la orilla con la botella en la mano y ve aproximarse una pequeña embarcación a remo, botada de un barco anclado a lo lejos, con cinco tripulantes que gritan como locos y agitan los brazos en alto. La botella le resbala de la mano y cae a sus pies. Ya en la arena, se abrazan los seis y el náufrago rompe a llorar, les da las gracias, besa sus manos, se arrodilla ante ellos y, finalmente, les advierte que no subirá a la embarcación sin sus dos compañeros de isla. La tripulación, sorprendida, emprende la búsqueda y pese a rastrear durante horas el lugar, no consigue encontrar a nadie. Aconsejan al náufrago, sospechando ya de su locura, que los acompañe al barco y se olvide de sus compañeros imaginarios pero él, con firmeza, insiste en que no son imaginarios, y que de ningún modo subirá sin ellos.

Tras una larga discusión, los cinco tripulantes suben indignados a la embarcación y se dirigen de nuevo al barco, dejando al náufrago en la orilla, orgulloso de su lealtad y su compañerismo, con una sonrisa en los labios que sólo se le borra cuando distingue, en la popa del barco que empieza ya a alejarse, a sus dos amigos imaginarios agitando unos pañuelos en señal de despedida.

(Mi más sincera enhorabuena a Víctor; os recuerdo su blog, Realidades Para Lelos, donde podréis leer más sobre su escritura: http://realidadesparalelos.blogspot.com/ ).

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Os dejo un relato de Manuel Mejia G., leído en facebook. Menuda (estupenda) forma de comenzar un cuento:

Manuel Mejia G      JUSTICIA MATERNA  (Manuel Mejia G.)

Esta vez la bofetada fue tan espectacular que hasta la sintió el lector, unos taparon sus ojos para no saber más y otras cerraron el libro para no ver recuerdos. Fue fuerte, sí, tanto que todo el cuerpo de Diana se echó de pa´atrás, perdió el equilibrio y fue a golpearse la cabeza con la esquina de la mesa que soporta con elegancia la foto de matrimonio, ambos bellos y de blanco, inocentes, aunque mentimos al decir bofetón, ya que fue un golpe con los nudillos, hacia adentro, logrando dejar un diente bailando. Le dolió la cabeza por el golpe con la mesa, más la boca, sentía el diente suspenderse, aunque lo peor fue la quijada, el epicentro de todo. Fernando en forma inmediata fue en su ayuda, a levantarla, socorrerla, que perdóname, amor, que tu sabes que me voy, que no controlo, y en efecto se había comenzado a ir cuando vio a Diana llegar de la calle, que la cogió a gritos, que pareces una puta, una puta, una fulana de la calle, a empujarla con vehemencia, a darle irónicos golpecitos con los dedos sobre sus cachetes, puta, que eres puta, que se te ven todas las tetas, que mira como sales a la calle, provocando, ¡pero qué dirá todo el mundo!, claro, que la hueva del tercero b tienes unos cachos que le llegan hasta el cielo, que se te ven las tetas, Diana, ¿o no te das cuenta?, y solo fue que Diana dijo que mira Fernando que no es para tanto, que tengo todo cerrado y solo se ve una esquinita del sostén, que no es nada, y ahí él comenzó a calentarse y se fue de más a más y acabó como se ha relatado. Ella salió de su casa, sin mirar, tomando el primer abrigo que sus manos tocaron, como cuando uno introduce una mano en la bolsa del mago para extraer quién sabe qué. La última vez había ido al parque de enfrente, a hablar con su conciencia y con dios. Ambos habían perdonado, la conciencia porque también el tiene su puntico de razón y dios con todo ese cuento de ofrecer la mejilla, o algo así. Ahora fue donde su madre a buscar mejor consuelo. Consuelo, su madre, la recibió con un cariño inimaginable, le colocó toallitas húmedas en la quijada, que dolía, en el chichón de la cabeza, el diente ya estaba casi caído y después de media hora de remilgos y carantoñas le aconsejó volver con su marido, ¿tú qué vas a hacer a estas alturas de la vida, cariño?, y que si lo miras bien él hace todo esto porque te quiere, que te ama, que quiere que seas suya, sólo suya, mi amor, no te quiere compartir, y no estás sola en esto, ¿sabes? O, ¿tú no crees que tu padre también tuvo sus momentos?, que no todos los hombres son ángeles de dios, créeme. Diana volvió a su casa a eso de las nueve de la noche, sin un diente, y dijo decidida sin saber si la oían: Fer, tenemos que hablar. 

(Manuel tendrá muy pronto nuevo libro de relatos en las librerías: RELATOS Y DEMENCIAS, avisados estáis :)).

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LEÍDO AQUÍ Y ALLÁ

1.-Una reflexión para comenzar la semana. Palabras de Martin Amis en la entrevista publicada en el periódico Ideal: «El futuro pasa por que las muejres tengan más poder».  ¿Estamos de acuerdo? Podéis leer el artículo completo aquí: http://www.ideal.es/granada/v/20100927/cultura/futuro-pasa-mujeres-tengan-20100927.html.

2.-El escritor Antonio Gómez Rufo afirma en Hay Festival Segovia: Los autores deben estar en facebook. ¿Opinamos lo mismo?

http://es.noticias.yahoo.com/9/20100924/ten-antonio-gomez-rufo-cree-que-los-escr-bbad18b.html

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Os deseo una jornada estupenda. Hoy, con Dean Martin y su Sophia: http://www.youtube.com/watch?v=U104gqTGReA .

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Encontrados en el baúl de los recuerdos virtuales. Mis artículos del 2007 en YoMujer.com siguen activos, jajjaa. Me gustó releer, mi «Teoría del círculo», «Amistades rotas» y «Alguien interesante». Qué perspectivas :).  (http://www.yomujer.com/category/general/relaciones/pareja/page/2/


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De amores … o similar

    ¡Muy buenos días! ¿Preparados para hincarle el diente a este martes? ¿Pasado ya el malhumor lunesco? Seguro que sí, ¡al menos eso espero!

Hoy la selección incluye textos sobre el amor, o la falta de él, todos magníficamente relatados, con historias de idas y venidas, con desencuentros, con juegos para salir de la rutina o no, con … un poco de todo. ¿Listos? Comenzamos … La primera lista de relatos están todos recogidos en «Por favor, sea breve 2», antologado por Clara Obligado y publicado por la editorial Páginas de Espuma:

CONFUSIÓN (Juan José Millás)

Antes de que hubiera terminado de desenvolver el regalo de cumpleaños, sonó dentro del paquete un timbre: era un móvil. Lo cogí y oí que mi mujer me felicitaba con una carcajada desde el teléfono del dormitorio. Esa noche, ella quiso que habláramos de la vida: los años qe llevábamos juntos y todo eso. Pero se empeñó en que lo hiciéramos por teléfono, de manera que se marchó al dormitorio y me llamó desde allí al cuarto de estar, donde permanecía yo con el trasto colocado en la cintura. Cuando acabamos la conversación, fui al dormitorio y la vi sentada en la cama, pensativa. Me dijo que acababa de hablar con su marido por teléfono y que estaba dudando si volver con él. Lo nuestro le producía culpa. Yo soy su único marido, así que interpreté aquello como una provocación sexual e hicimos el amor con la desesperación de dos adúlteros. Al día siguiente, estaba en la oficina, tomándome el bocadillo de media mañana, cuando sonó el móvil. Era ella, claro. Dijo que prefería confesarme que tenía un amante. Yo le seguí la corriente porque me pareció que aquel juego nos venía bien a los dos, de manera que le contesté que no se preocupara: habíamos resuelto otras crisis y resolveríamos esta también. Por la noche, volvimos a hablar por teléfono, como el día anterior, y me contó que dentro de un rato iba a encontrarse con su amante. Aquello me excitó mucho, así que colgué enseguida, fui al dormitorio e hicimos el amor hasta el amanecer. Toda la semana fue igual. El sábado, por fin, cuando nos encontramos en el dormitorio después de la conversación telefónica habitual, me dijo que me quería pero que tenía que dejarme porque su marido la necesitaba más que yo. Dicho esto, cogió la puerta, se fue y desde entonces el móvil no ha vuelto a sonar. Estoy confundido.

 CONSEJOS DE ALMOHADA (Teresa Serván)

Aquella noche debía decidir si iba a abandonarla. Llegó a casa de madrugada y descubrió que su esposa se había quedado dormida en su lado de la cama. Se acostó en la mitad del colchón que no le correspondía. Echó de menos su almohada, gruesa y firme, gran consejera y tuvo que pelearse con la de su mujer. Él amaneció temprano, dispuesto a ponerse el vestido rojo para la boda del sábado. Ella, extrañamente resuelta a huir con la joven amante que ignoraba tener.

AMOR I (Raúl Brasca)

A ella le gusta el amor. A mí no. A mí me gusta ella, incluido, claro está, su gusto por el amor. Yo no le doy amor. Le doy pasión envuelta en palabras, muchas palabras. Ella se engaña, cree que es amor y le gusta; ama al impostor que hay en mí. Yo no la amo y no me engaño con apariencias, no la amo a ella. Lo nuestro es algo muy corriente: dos que perseveran juntos por obra de un sentimiento equívoco y de otro equivocado. Somos felices.

AMOR II (Raúl Brasca)

Pretende que yo estoy enamorada del amor y que a él sólo le interesa el sexo. Dejo que lo crea. Cuando se cuerpo se estremece, lo atribuye a sus muchas palabras. Cuando mi cuerpo lo estremece, lo atribuye a su propio ardor. Pero me ama. Y no lo saco de su engaño porque lo amo. Sé muy bien que seremos felices lo que dure su fe en que no nos amamos.

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Esta segunda tanda pertenece a los microrrelatos que participaron en el concurso de Relatos en Cadena de la Ser:

ABISMO (Juan José Quintas Feijoo, finalista del 11/3, semana 19)

Ese tic tac que escuchamos hace rato al otro lado de la pared nos resulta ahora especialmente molesto. En otra época nos reíamos, comentábamos su ritmo, sus variaciones, y muchas veces lo emulamos como metrónomo de nuestra propia cadencia. Está claro que los dos lo oímos, callados en la oscuridad, esperando incómodos a que termine y, sin hacer ningún comentario, nos giramos cada uno hacia nuestro lado abriendo un abismo de colchón vacío.

CON EL CIELO GANADO (Juan Martín Araujo, finalista del 11/2, semana 17)

—¡Acelera! —grita mi mujer, para presumir del carísimo coche que me hizo comprar.
—¡Espabila! —me abochorna haciendo que nos saltemos las colas en los supermercados.
—¡Aligera! —me tira del brazo cuando vamos a cruzarnos con gente de mi familia, a quien nunca le apetece saludar.
—¡Abrevia! —me corta cuando intento desahogarme contándole los apuros de mi trabajo.
—¡Apúrate! —me obliga a engullir rápidamente el almuerzo, porque prefiere la sobremesa con las amigas.
—¡Apresura! —me mete prisa cuando saco dinero para su estilista, su masajista o su lotero.
En cambio, las escasas noches que no finge dolor de cabeza:
—¡Frena, Pepe, frena!

EL FIN DEL ROMANTICISMO (Sara Barbera Sánchez, finalista del 10/12, semana 10)

Ni subido a una escalera conseguiría besarte. Llevo días dándole vueltas al tema y no se me ocurre nada. Yo no puedo saltar tanto y la escalada nunca fue mi fuerte. He pensado en llamar a los bomberos para que me presten la escala, pero dudo que consideren lo mío una emergencia. También pensé en comprar cien globos e hincharlos de helio pero creo que eso solo funcionaría si yo fuese un dibujo animado. Al final no voy a tener más remedio que bajarte del pedestal. Tanto romanticismo no es práctico.

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Termino con un relato de Carlos Salem, publicado en «Yo también puedo escribir una jodida historia de amor» (Ediciones Escalera):

LIGAR, EN TODOS LOS SENTIDOS

2. Alear. (Del lat. Alligare) Producir una aleación, fundiendo sus componentes
Se miraron e hicieron como que no se veían. Él sintió una punzada y ella parpadeó tres veces y se enderezó en la silla. Nada más. La vida siguió pero algo flotaba y lo sabían. Hablaban como por casualidad, manteniendo las formas. Ella le envío una señal pero sin usar la sonrisa y a él, entre otras cosas, lo que le gustaba era su sonrisa. No respondió. Pero procuró cruzarse con ella con más frecuencia. Nada más. Ella desplegaba el mejor de sus encantos, el carácter. Y él optaba por no mostrarse mucho para que el deseo no sobresaliera, y en la superficie había calma aunque debajo hervía la tormenta. ¿Quién empezó? Cada uno a su manera, desafíos discretos, perfiles, llamadas. Nada más. Podía quedar en eso y lo sabían. ¿Quién dio el primer paso? Fueron dos y los llevaron a desatar los nudos en e-mails tórridos o sugerentes, y ya sin nudos se enfrentaron una tarde y dejaron de preguntarse quién cazaba a quién y disfrutaron de la caza y de la presa, se dieron lo prometido y lo que las intuiciones no se atrevieron a vaticinar. Y se lo siguen dando cuando pueden. Nada más.
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Bien, chic@s, esto es todo por ahora. Abrid bien los ojos y la mente, que seguro que el día nos depara cosas muy buenas.  http://www.youtube.com/watch?v=C_Aw_8QIDI0&feature=related


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Feliz Domingo

Muy buenos días… uyy qué poquito queda para el sorteo de Navidad! Confieso que cada año me emociono con las imágenes de los agraciados, esas botellas de cava compartidas, tantas familias que consiguen tapar agujeros… Y este año, aún más, tal y como está el panorama. Así suerte, muchísima suerte para todos nosotros, que los números nos sean favorables y podamos aparecer este año nosotros en la tele, jajaja.

Muchos os habreís desplazado a ver la familia (Anabel, Julián, zar…), cuidado, cuidadísimo en la carretera, ein??? ¡que os quiero leer por aquí a vuestro regreso!

http://www.youtube.com/watch?v=Xz-UvQYAmbg

AIN’ T NO MOUNTAIN HIGH ENOUGHT 

If you need me, call me. No matter where you are, no matter how far.
Just call my name. I’ll be there in a hurry.
On that you can depend and never worry.

(You see, my love is alive It’s like a seed that only needs the thought of you to grow.
So if you feel the need for company, please, my darling, let it be me.
I may not be able to express the depth of the love I feel for you,
but a writer put it very nicely when he was away from the one he loved.
He said down and wrote these words:)

No wind, (No wind) no rain, (no rain)
Nor winter’s cold
Can stop me, babe (oh, babe) baby (baby)
If you’re my goal

No wind, no rain,
Can stop me, babe
If you wanna go

I know, I know you must follow the sun
Wherever it leads
But remember
If you should fall short of your desires
Remember life holds for you one guarantee
You’ll always have me

And if you should miss my love
One of these old days
If you should ever miss the arms
That used to hold you so close, or the lips
That used to touch you so tenderly
Just remember what I told you
The day I set you free

Ain’t no mountain high enough
Ain’t no valley low enough (Say it again)
Ain’t no river wild enough
To keep me from you

Ain’t no mountain high enough
Ain’t no valley low enough (Say it again)
Ain’t no river wild enough
To keep me from you

Ain’t no mountain high enough
Nothing can keep me
To keep me from you

Ain’t no mountain high enough
Ain’t no valley low enough (One more time)
Ain’t no river wild enough (Say it again)
To keep me from you

Ain’t no mountain high enough
Nothing can keep me
To keep me from you

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Leído en… www.premiosliterarios.com

EL PAÍS, 13 de diciembre de 2008

Premio

MANUEL RODRÍGUEZ RIVERO / Ilustración de Max

Leo con preocupación que el Premio Tusquets de Novela, que se da a conocer durante la Feria del Libro de Guadalajara, ha sido declarado desierto por segunda vez. Que entre las 427 obras seleccionadas no hubiera ninguna merecedora del galardón a juicio de un Jurado cuya solvencia está por encima de toda sospecha dice bastante acerca de la calidad de los originales en litigio. Sin duda el veredicto final es un signo de independencia y rigor crítico. Pero también podría interpretarse como una especie de seppuku que se infligen los organizadores. Elegir la novela menos insatisfactoria es, a menudo -y más allá de las vergonzosas corruptelas frecuentes en otros galardones-, una razonable solución para no torpedear al premio bajo su línea de flotación, especialmente si ésta es precaria, como le ocurre a los premios sin mucha historia. Los editores saben perfectamente que hay años de buenas cosechas y otros de malas: en unos y otros la responsabilidad del comité de selección -que es el que filtra la media docena de originales que, finalmente, lee el Jurado- es enorme. Confiemos, en todo caso, en que se cumplan los votos por la continuidad del premio formulados desde Tusquets, una de las más prestigiosas (y con motivo) editoriales literarias del mundo hispánico. En el caso del premio La Sonrisa Vertical no fue así. En cuanto a la escasa calidad de las novelas seleccionadas, pienso que quizás Tusquets pudiera conseguir algo más si suavizara o hiciera menos rígidas ciertas bases de la convocatoria, especialmente las que en la práctica excluyen la presentación de originales de autores representados por los agentes literarios, una figura a la que cada vez recurren con más frecuencia incluso los escritores aún inéditos. Y que, además, ya forma parte inevitable e imprescindible del paisaje literario: para lo bueno y para lo malo. No es una cuestión baladí, sobre todo si tenemos en cuenta que estamos hablando de un premio que levanta enormes expectativas y que está dotado (para el año que viene) con una bolsa de 40.000 euros.


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Leído en …www.premiosliterarios.com (2)

 LA VOZ DE GALICIA, 6 de diciembre de 2008

«No quiero escribir sobre temas que funcionan, perjudica a la literatura»

La ganadora del premio Ateneo Joven de Sevilla, Rebeca Tabales (Madrid, 1981), tiene tan clara su vocación literaria que estudió Psicología porque le interesaba formarse en ese campo para ser narradora. Su primera y galardonada novela, Eres bella y brutal , es la historia de tres personajes «grises y heridos»: Una colegiala de 13 años, su profesora, la hermana Teo, y Mateo, misionero en Ruanda.

-¿Por que eligió la religión como fondo y nexo de los personajes?

-Se desarrolla en un colegio religioso porque me permitía que se hicieran preguntas que mostraran una parte de la historia que no se muestra desde un punto de vista laico. Los religiosos tienen una parte inmadura que les hace parecerse a la niña. Ninguno se ha enfrentado al mundo como lo hace la mayoría de la gente.

-¿La niña es maquiavélica, no?

-Sí, es muy inteligente pero carece de experiencia, y construye monstruos.

-¿El misionero es un contrapunto?

-Necesitaba probarme que podía escribir más que de lo que he vivido, y África es la representación de la belleza y de la brutalidad, es como el Edén bíblico.

-¿El premio es un reto para seguir?

-Voy a intentar seguir el plan que tenía antes de ganarlo, no pensar en lo que va a pasar después y tomármelo con calma. No quiero caer en escribir sobre temas que funcionan. Perjudica a la literatura y el lector lo nota.


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Leído en … www.premiosliterarios.com

 DIARIO DEL ALTO ARAGÓN, 8 de diciembre de 2008

La literatura, icono del inconformismo y respuesta a la soledad interior

La mañana de la jornada dominical de la XIV Feria del Libro Aragonés de Monzón deparó una amena charla coloquio en la que participaron los escritores Óscar Sipán, Ángel Guinda y Miguel Ángel Yusta, moderados por el compañero de armas Ignacio Escuín.

 

MONZÓN.-La pregunta de arranque fue ¿cómo se llega a la literatura?, y las respuestas oscilaron entre el ánimo rebelde de quien escribe (porque quiere que las cosas cambien a mejor) y la necesidad de llenar vacíos interiores causados por el dolor, la soledad y, en no pocas ocasiones, la inadaptación al medio envolvente. Así, se puede afirmar que la pluma siempre la carga el inconformismo.

Yusta, que se definió como «poeta de base» y reivindicó el arte de la copla, dijo que le condujeron a la escritura «la ausencia y el dolor», y valoró más la faceta de la «satisfacción personal» que los premios o las ventas («en cualquier caso, bienvenidos sean»). Sipán esgrimió un aforismo para aquilatar la profesión: «La literatura sirve para no conformarse con la vida». Y a renglón seguido ensalzó la «ambición literaria», es decir, que el autor tenga como norte mejorar día a día y, también, abordar asuntos que interesen al potencial lector.

Guinda explicó que su padre lo matriculó en Medicina sin estar él convencido, ni mucho menos, de que fuera a llevarse bien con el bisturí. «La soledad enorme, la rebeldía y la inadaptación al mundo exterior me empujaban hacia otros caminos. Meditaba y deambulaba por los parques. Un día leí un poema de Baudelaire y lo vi claro. Es ese que concluye con el verso «al escritor, sus alas de gigante le impiden caminar». Perfecta definición de nuestro problema: las alas grandes o pequeñas que nos molestan en tierra».

¿Se puede vivir de la escritura? Muy pocos, sólo los elegidos por el Dios de las reediciones. Yusta apuntó que el requisito fundamental es «ser bueno», y Guinda mencionó la suerte: «Yo viví dos o tres años de los ingresos de unos poemas a los que pusieron música Rosa León y Amaya. Al margen de esto, redondean los ingresos las conferencias. En fin, el resumen es que no vivimos de la poesía, sino para la poesía». Sipán sentenció que una vez tomada la decisión de ser escritor, la clave radica en encontrar el equilibrio entre la letra que uno venera y el dinero necesario para vivir.

En relación con las nuevas hornadas de escritores, Yusta apuntó que «hay gente joven con demasiada prisa por publicar», y Sipán recomendó la autocrítica. Guinda, con humor, aceptó que hay más poetas que lectores de poesía, y todos coincidieron en que es una barbaridad que lleguen 500 novedades cada año a las librerías. «Se están perdiendo libros en el limbo por la propia avalancha de títulos, y no hay reediciones», subrayaron.

¿Cuál es el reto del prosista o el poeta? Guinda no dudó en la respuesta: «Hay que llegar a los suficientes lectores. El poema tiene que ser útil, servir para algo. Ya alertó de ello Antonio Machado. Si no provocamos la meditación o avivamos algún sentimiento, no hemos conseguido nada». Yusta aportó el apunte de que «el texto ha de ser inteligible, huir de lo críptico». Y Sipán remató con otro aforismo: «La poesía es un árbol sin hojas que da sombra».


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Leído en… Yahoo Noticias Literarias

 Le Clézio dedica su Nobel a una contadora de cuentos panameña

Estocolmo, 7 dic (EFE).- El bosque de paradojas pero también el real fueron hoy objeto de un sentido elogio por parte del premio Nobel de Literatura 2008, el francés Jean-Marie Gustave Le Clézio, quien destacó el tiempo que pasó en Darién (Panamá) y dedicó su galardón a Elvira, una joven lugareña que contaba cuentos

En una ceremoniosa conferencia celebrada en la Gran Sala de la Academia Sueca, Le Clézio citó las obras que marcaron su carrera literaria, entre las que destacó «Don Quijote», «La vida de Lazarillo de Tormes», «Los viajes de Gulliver» o «El hombre que ríe».

Y los escritores que le han influido, desde Cicerón a William Faulkner, pasando por Jean-Jacques Rousseau, Euclides da Cunha, James Joyce o Stieg Dagerman. Además dedicó el premio, que recibirá el próximo miércoles, a Elvira, que en un bosque alejado de la sofisticación de la literatura era ejemplo de un arte que «se expresaba con la mayor fuerza y autenticidad».  Una joven que viajaba por el bosque de Darién, un lugar en el que Le Clézio pasó, en diferentes momentos, unos tres años de su vida y en el que habitan los emberas y los waunanas. Un lugar y unos habitantes hostiles que terminaron por aceptar al escritor, que aprendió allí a vivir bajo un ritmo totalmente diferente a todo lo que había conocido hasta entonces. Y que le hizo darse cuenta de «que la literatura podía existir a pesar de toda la usura de las convenciones y de los compromisos y a pesar de la incapacidad de los escritores de cambiar el mundo». Pero le Clézio también dedicó el Nobel a una interminable lista de escritores de todos los rincones del mundo, entre los que había bastantes nombres de América Latina. Juan Rulfo, con su «Pedro Páramo» y «El llano en llamas», por las fotos «simples y trágicas» del campo mexicano; a Jean Meyer por haber aportado la palabra de Aurelio Acevedo y de los insurgentes cristeros de México central; a Luis González, autor de «Pueblo en vilo»; a José María Arguedas; a Octavio Paz; a Miguel Angel Asturias y al poeta Homero Aridjis. Y a otros tantos autores africanos, europeos, asiáticos, de las primeras naciones de América. Pero sobre todo, Le Clézio habló hoy del bosque de las paradojas, definido por Dagerman, en el que viven los escritores y del que no pueden escapar, sino dejarse llevar y «explorar cada sendero» dentro del privilegio que supone la libertad de movimientos y de vivir donde se elija. Porque para Le Clézio, «la prohibición de vivir en el lugar de elección es tan inaceptable como la privación de la libertad». Algo que ha reflejado en sus obras, comprometidas hasta la última coma con el mundo en el que vive y los países y continentes recorridos por este escritor, nacido en Niza en 1940 pero que se considera «mauriciano» (de dónde procedía su padre). Los escritores viven entre un enorme número de paradojas. La de no poder expresarse siempre en la lengua que hablan, la de la revolución -que Le Clézio ejemplificó en el caballero de la triste figura-, la de la soledad o la de ser testigo de algo que no han visto. Lo que no impide a la literatura seguir existiendo a pesar de las nuevas artes, como el cine. «La literatura es una vía compleja, difícil, pero que yo creo aún más necesaria hoy que en los tiempos de Byron o Víctor Hugo». Y que seguirá existiendo a pesar de las dificultades y de que en algunos países el libro sigue siendo un lujo lejos del alcance de los más pobres. Justamente esa es la «paradoja fundamental del escritor», la de no «poderse dirigir a aquellos que tienen hambre -de comida y de saber-, dijo Le Clézio, quien expresó su deseo de que en este tercer milenio «ningún niño, sea cual sea su sexo, su lengua o su religión, sea abandonado al hambre o a la ignorancia, dejado de lado del festín».

Alicia García de Francisco


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Leído en www.premiosliterarios.com

 

EL COMERCIO, 28 de noviembre de 2008

FÉLIX J. PALMA GANADOR DEL ATENEO DE SEVILLA

«En España hay prejuicios contra el

 

género fantástico»

 

Presenta ‘El mapa del tiempo’, una novela que «está entre Dan Brown y Javier Marías»

M. FRECHILLA | OVIEDO

Félix J. Palma ganó el XL Premio de Novela ‘Ateneo de Sevilla’ con ‘El mapa del tiempo’, que tiene como protagonista al escritor británico H. G. Wells y, por tanto, homenajea al género de la ciencia ficción sin pertenecer a él. El libro, que acaba de salir al mercado, garantiza ritmo trepidante, aventuras, amor y calidad literaria a partes iguales con la época victoriana como marco de la historia.

 

-Algún crítico dice que es el Mejor Ateneo de Sevilla en sus 40 años, cuando lo han ganado el nuevo premio Cervantes, Juan Marsé, o Jesús Torbado.

 

-La historia que te interesa como escritor piensas que le puede interesar al lector. Pero yo tenía miedo a que el público, que no lee literatura de género, rechazara esta historia de ciencia ficción, que además habla de viajes en el tiempo. Tenía que intentar que los personajes se sobrepusieran a la temática, para que los prejuicios contra lo fantástico, que en España los hay, de alguna manera fueran vencidos por la calidad literaria de la obra. Y me estoy encontrando con una buena respuesta por parte del público.

 

-Además, es la primera vez que este galardón distingue una novela de género fantástico.

-Que esta novela haya sido premiada con el Ateneo de Sevilla me hace albergar esperanzas de que mi apuesta, conseguir que una novela fantástica llegue a todo tipo de público, es la correcta.

 

-La ciencia ficción no es un género en boga comparado con otras épocas, cuando triunfaban Julio Verne, el propio Wells o Asimov.

-Esta novela rinde un homenaje a la ciencia ficción porque el protagonista es H. G.Wells, el padre del género. Pero yo no la encuadraría dentro del mismo. Es una novela de amor, romántica, de aventuras, detectivesca… Todo esto forma una amalgama que si se encuadrase dentro de un género, sería el de la literatura popular, la novela de aventura de antes que nos hizo soñar de niños, un género que en este momento se hace muy poco porque se tiende a la novela psicológica.

-La novela tiene todos los ingredientes de un ‘best-seller’: más de 600 páginas, es entretenida y no se detiene en descripciones. ¿Se puede considerar como tal?

-No lo escribí con vocación de ‘best-seller’; si no, hubiera cogido como tema una sociedad secreta masónica o algo parecido. Yo no la veía como algo comercial, pero luego me he encontrado con que funciona. Quizá se acerca al tipo de trama del ‘best-seller’. Está entre Dan Brown y Javier Marías, entre lo comercial y la calidad literaria.


9 comentarios

¡Feliz viernes!

Mirad qué contenta estoy ce matin:

 

Es lo que tienen los viernes … que suponen el preámbulo de días de asueto, tertulia, fiestecilla, amistades renovadas y por hacer… ¡Benditos venerdì!

Además, este fin de semana es también fin de mes, así que ¡yuppi! nómina al canto …

Hablando de otra cosa. Mensaje de la Librería 3 Rosas Amarillas:

La Editorial Salto de Página y la Librería tres rosas amarillas tienen el placer de invitaros a la lectura de relatos y firma de ejemplares con Jon Bilbao, autor de «Como una historia de terror», obra ganadora del Premio Ojo Crítico de Narrativa 2008.

Os esperamos el martes 2 de diciembre en Tres rosas amarillas (San Vicente Ferrer, 34), de 20:00 a 22:00 horas.

Leído en www.premiosliterarios.com

DIARIO METRO, 17 de noviembre de 2008

Fernández Cubas reúne más de 25 años de escritura en «Todos los cuentos»

Carmen Sigüenza

La escritora catalana Cristina Fernández Cubas, considerada una maestra del relato, género con el que ha cautivado a una inmensa corte de lectores fieles, ha reunido más de veinticinco años de escritura en «Todos los cuentos», un volumen con todos sus relatos además de uno inédito, «El faro», homenaje a Alan Poe.

Fernández Cubas (Arenys de Mar, 1945) empeñada en descubrir los misterios de la vida cotidiana, las apariciones que alteran el aparente orden diario o la cara más real de los sueños, siempre ha sido una escritora independiente y la ido bien con ello, pues desde que en 1980 publicase «Mi hermana Elba» no ha parado de cosechar el éxito y el respeto de la crítica y publicó.

Así, ahora, la editorial que apostó por ella desde el principio Tusquest, ha reunido veinte relatos procedentes de cinco libros: «Mi hermana Elba», «Los altillos de Brumal» (1983), «El ángulo del horror» (1990), «Con Agatha en Estambul» (1994) y «Parientes pobres del diablo» (2006).

«Habitar espacios a los que no se ha tenido acceso, rescatar ambientes, y, sobre todo, viajar hacia infinitos lugares, algo que sólo te permite la literatura, ha sido siempre mi intención», explica a Efe Fernández Cubas.

Este deseo que ha alimentado tanto los relatos como las novelas de esta escritora, recorren este volumen, en el que no sólo queda patente la coherencia de una carrera literaria sino todo el recorrido sentimental de la autora, unida desde 1970 al escritor, ya fallecido, Carlos Trías, y miembro de aquella generación de escritores y editores catalanes, acuñados a orillas del mediterráneo, con ansias de libertad y de comerse el mundo conocidos como «La gauche divina».

«Estoy muy contenta con el libro, pero tengo un sabor agridulce, porque al repasarlo también veo a las personas que han pasado por mi vida, las que están y las que no están», precisa Fernández Cubas, que dedica el volumen a Carlos Trías, quien mandó su primer manuscrito a Beatriz de Maura, directora de Tusquets.

La cita de Pascal que abre el libro: «la suprema adquisición de la razón consiste en reconocer que hay una infinidad de cosas que la sobrepasan», resume «a la perfección, sin más», en opinión de la autora, todo el espíritu de su escritura, que es un canto a la imaginación, y del libro.

«Esta idea de Pascal ejemplifica la situación fronteriza en la que me encuentro, entre lo conocido y lo no conocido, y lo dice Pascal, que es un hombre de ciencia. Me gusta lo cotidiano, lo misterioso, el lugar donde no llega el ojo; el misterio de la vida», argumenta esta autora, a la que desde niña sus hermanos mayores la cautivaban contándole cuentos de Edgar Alán Poe.

De ahí que haya querido incluir en este libro un regalo en forma de ejercicio literario consistente en dar continuidad al relato de Poe «El faro», con el que se cierra este libro.

«En realidad -aclara-, no fue una idea mía sino de la editorial Altera que había encontrado un texto inconcluso de Poe y nos pidió a unos escritores que lo termináramos. Me fascinó la idea, aunque era un asunto tremendo, pero en Santander viendo aquel mar, de repente, lo vi claro, y lo he querido meter en esta colección.

Cristina Fernández Cubas, para quien el mundo de los sueños es una herramienta fundamental, no quieren ni oír hablar de la tan traída y llevada crisis del cuento.

«Me niego a hablar de eso. El cuento es un género en si mismo, que requiere algo más de atención por parte del lector, sugiere más que dice en muchos casos y goza de excelente salud. Hay grandes editoriales que se dedican sólo a eso y autores maravillosos a ambos lados del Atlántico», concluye.

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Este artículo también lo he leído en www.premiosliterarios.com. Os dejo un extracto solamente, pues es bastante largo. Si alguien quiere continuar su lectura, que se pronuncie.

 

EL COMERCIO, 18 de noviembre de 2008

Charla impartida por el escritor y colaborador de EL COMERCIO> Nombrar lo innombrable

por Ricardo Menéndez Salmón

I

Así como existen muchas formas de escribir, tantas en realidad como miradas se pueden arrojar sobre la realidad, así también existen múltiples modos de referirse al hecho literario, múltiples modos de intentar comprender en qué consiste, qué subyace bajo esa intuición compartida, qué significa esa constante interpelación que definimos bajo el rótulo literatura.

Julia Kristeva definió la literatura como un movimiento aporético, como el intento por aproximarse hacia una meta que jamás se alcanza, como la aspiración hacia una finalidad constantemente defraudada.

Esta tesis académica, tan profunda como bellamente enunciada, aunque intuitivamente compleja, parece pensada más para escritores que para lectores. Kristeva presenta al autor como un Sísifo que acarrea, una y otra vez, la piedra del lenguaje a una ladera por la que indefectiblemente acabará rodando. La realidad se deja tematizar, pero no se deja esclerotizar; la realidad se deja interrogar, pero sus respuestas son siempre parciales, fallidas, truncadas. La realidad se deja cercar, pero no se deja cazar. La literatura no es una red que podamos aplicar sobre el mundo. Por muy fino y estrecho que sea el diámetro de sus losanges, siempre habrá peces que se escapan. Y como bien sabían los capolavoro renacentistas, Dios está en los pequeños detalles, así que, en ocasiones, es posible que los peces más pequeños sean también los más jugosos.

Al otro lado del espectro, Josep Pla escribe algo similar a Kristeva pero con una prosa llana, prístina, destinada a evocar en la conciencia del lector la evidencia de la dificultad ínsita al acto de escribir. Pla no parece estar escribiendo aquí para sus colegas de vocación, sino para quienes acceden acríticamente al placer y misterio de la lectura.


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Leído en … www.premiosliterarios.com

IDEAL, 1 de noviembre de 2008

Margaret Atwood, una señora joven

 

ANDRÉS NEUMAN

DEMASIADO a menudo, a los escritores que tenemos la discutible y muy efímera virtud de ser más o menos jóvenes nos preguntan cosas como: «¿Qué novedades aportan a la literatura los jóvenes escritores del presente?». La pregunta me inquieta por partida doble. No sólo porque presupone erradamente que el presente es territorio exclusivo de los jóvenes, sino porque además parece dar por sentado que las grandes novedades artísticas no pueden provenir de artistas ya maduros o incluso ancianos. Desde Goethe, Händel o Miguel Ángel hasta Borges, Picasso o Bergman, ambas ideas son por supuesto falsas.

La semana pasada una escritora moderna, joven y casi septuagenaria recibió merecidamente el Premio Príncipe de Asturias de las Letras: la canadiense Margaret Atwood. Candidata al Nobel desde hace tiempo, Atwood es autora de novelas futuristas como ‘El cuento de la criada’ (ciencia ficción, o no tanto, de género) y ‘Oryx y Crake’ (ciencia ficción, o no tanto, ecológica y sanitaria), libros de cuentos como ‘Érase una vez’ (que en realidad es una reedición española de textos de diferentes épocas) y colecciones de ensayos como ‘La maldición de Eva’ (que en realidad se titula algo así como ‘Persecuciones curiosas’ y se cuenta entre lo más lúcido que se haya escrito sobre el presente histórico de las mujeres).

Atwood ha sabido prolongar el bendito pecado original de las grandes escritoras de su estirpe, esa que va de Sor Juana Inés de la Cruz a Virginia Woolf, pasando por Jane Austen o George Sand: una potente cultura camuflada de humor ligero, una extrema agudeza en el análisis psicológico, cierta capacidad teatral para exponer sus reflexiones, el don de la ironía inteligente. Capaz de pensar a corta y larga distancia, Atwood es igual de eficaz rescatando recuerdos personales (como en el delicado, sentido cuento ‘Betty’) que radiografiando los problemas de nuestro futuro inmediato. Esta combinación de sentimientos y abstracciones, de intimidad y sociología, la convierte en una escritora completa. A ello hay que sumarle su implacable perspicacia como lectora. Sobre la literatura victoriana, en la que se especializó como crítica, Atwood observó lo siguiente: «Fue la época por excelencia en que las tramas giraron en torno al dinero y la gente estaba empantanada en explosiones de capitalismo». Nada más vigente hoy que una interpretación como esa. «A Madame Bovary», concluye, «podría haberle ido bastante bien si se hubiera mantenido dentro de su presupuesto. No fue el adulterio, sino las deudas, lo que la hundió».

El feminismo de Atwood es tan sólido como políticamente incorrecto. Lejos de limitarse a la reivindicación de los derechos de las mujeres y sus espacios propios frente al patriarcado (cosa que por supuesto nunca ha dejado de hacer), además ha escrito con sabiduría sobre las contradicciones de la lucha feminista y sobre algo de crucial importancia en la sociedad actual: el derecho fundamental de toda mujer «a ser considerada como individuo y no como ‘ejemplo de género’». Atwood pertenece a esa clase de intelectuales lúcidos que, además de luchar por romper las viejas jaulas, nos alertan del peligro de construir jaulas nuevas. La madurez ideológica de la señora Atwood, cuyos ensayos suenan más jóvenes y frescos que las opiniones de mucha gente de 20 o 30 años, resulta iluminadora: «Algunas escritoras tendían a polarizar la moralidad en géneros, es decir: las mujeres eran intrínsicamente buenas y los hombres malos ( ) Las mujeres que llevaban tacones altos y maquillaje eran inmediatamente sospechosas ( ) ¿No estaría permitido nunca más hablar de la ambición de poder de las mujeres, porque se suponía que las mujeres eran seres igualitarios? ¿No se podía describir el venenoso comportamiento practicado a menudo por unas mujeres contra otras? ( ) ¿Se iban a quedar los hombres con todos los personajes jugosos?».

Los argumentos de Atwood son una mezcla de sentido común y atrevimiento. Cuando los tópicos son fuertes, el sentido común puede ser el mayor de los atrevimientos. ‘La maldición de Eva’ contiene dos o tres textos memorables que deberían ser lectura obligatoria en todas las facultades. Uno de ellos se titula ‘Crear el personaje masculino’, clarificador ensayo acerca de la mirada narrativa masculina sobre los personajes femeninos, y viceversa. La conferencia empieza de forma provocadoramente sarcástica, como para medir la temperatura machista de su auditorio; y termina desplegando una visión autocrítica, verdaderamente igualitaria, de las teorías de género y sus consecuencias literarias: «Con demasiada frecuencia topamos con la idea de que sólo el sufrimiento del sexo femenino es sufrimiento auténtico, sólo los miedos de las mujeres son miedos de verdad. Esa idea es equiparable a la de que sólo la clase obrera es real ( ) Para las mujeres, definirse a sí mismas como indefensas y a los hombres como todopoderosos supone caer en una vieja trampa, evadir la responsabilidad ( ) Describir un mundo en el cual las mujeres ya son iguales a los hombres en poder, oportunidades y libertad de movimientos, es una abdicación similar ( ) Si eres una mujer que escribe, alguien, en algún sitio, te preguntará: «¿Se considera usted ante todo escritora, o ante todo mujer?» Cuidado. Cualquiera que haga esta pregunta odia y teme tanto a la literatura como a las mujeres». A mí me gustaría amar a Atwood y a su brillante literatura.